La programación es un proceso que establece las pautas de actuación de un proyecto de enseñanza-aprendizaje (ya sea un módulo, unidad didáctica, curso, sesión de formación). Supone un conjunto de operaciones que el personal docente, individual o en equipo, lleva a cabo para organizar, ejecutar y regular una actividad, situada en un determinado contexto educativo.
Cuando el personal docente se enfrenta a la tarea de programar una acción formativa de su especialidad, es importante que se plantee una serie de preguntas:
¿Qué considero imprescindible que aprenda el alumnado?
¿Qué les interesa o puede interesar?
¿De qué forma quiero que lo aprendan?
¿Qué tiempo y materiales necesito para llevar a cabo el programa?
¿De qué forma evaluaré los resultados?,... etc.
La necesidad de programar nos ayudará a:
- Evitar pérdidas de tiempo.
- Sistematizar y ordenar el proceso de enseñanza-aprendizaje.
- Adaptar la acción formativa a las características culturales y ambientales del contexto.
La programación ha de contar con la suficiente flexibilidad y apertura para dejar posibilidades a la creatividad, revisión y reforma de sus elementos.
1.1 UTILIDAD Y FINALIDAD DE LA PROGRAMACIÓN DIDÁCTICA.
Razones que justifican el proceso de la Programación didáctica:
- La acción docente tiene la suficiente importancia como para no dejarla al azar.
- Delimita los objetivos que pretendemos alcanzar.
- Contempla todos los aspectos formativos, tanto los referidos a conocimientos, como habilidades y actitudes.
- Ofrece datos concretos de la acción docente que se va a desarrollar.
- Ayuda a la organización coherente de los factores que intervienen en el proceso formativo
- Permite integrar ejes temáticos de carácter transversal.
- Posibilita la adaptación a las necesidades e intereses personales del alumnado.
- Permite el aprovechamiento de las actividades y recursos disponibles.
- Posibilita la distribución de las actividades formativas en un tiempo dado evitando el riesgo del desarrollo de programas incompletos que nunca llegan a su fin.
- Proporciona al alumnado información suficiente para conocer el proceso en el que se han comprometido o van a comprometerse.
La programación aporta beneficios:
A) Al personal docente:
- Es una guía sobre la que preparase la materia, organizar el tiempo, preparar materiales…
- Es una fuente permanente de autocrítica, reflexión y perfeccionamiento del equipo docente.
- Evita sentimientos de angustia, ansiedad, de incertidumbre en el día a día y en su lugar logra un sentimiento de más seguridad y confianza en lo que tiene que hacer en el aula.
- Favorece la mejora continua, la búsqueda de calidad y la autoafirmación del personal docente. Realizamos constantes mejoras a partir de la información que vamos obteniendo.
- Permite reflexionar sobre la propia actuación docente.
- Imprime rigor y calidad a la actuación docente.
- Facilita la tarea al personal docente en caso de sustituciones.
- Permite la evaluación del proceso formativo contrastando la adecuación de los resultados a las previsiones realizadas.
- Sirve de apoyo para próximas acciones formativas, consultando y ajustando en función de las nuevas necesidades.
B) Al Alumnado:
- Facilita la comprensión de las actividades propuestas así como su ubicación en el proceso formativo: en qué momento del curso se encuentra, qué se ha visto y qué queda por tratar.
- Favorece la auto organización del alumnado, mostrándole los contenidos del curso, la temporalización, recursos disponibles, actividades…Propicia procesos formativos basados en el aprendizaje autónomo.
- Permite la autoevaluación del alumnado, ya que en la medida en que conozcan lo que se exige, podrá medir sus propios logros.
- Facilita la creación de un clima de confianza en el propio proceso.
C) A la institución:
- Informa a otros profesionales sobre nuestra acción formativa.
- Responde a los requisitos administrativos.
- Puede ser un instrumento de evaluación para el personal docente en procesos de selección, y la para valorar la rentabilidad de la acción formativa en sí.
El considerar todas estas razones como lo suficientemente importantes para realizar una programación, no garantiza necesariamente el éxito de la acción formativa. Este éxito viene dado por las respuestas que se sepan dar a las necesidades, intereses y expectativas del alumnado y a los requerimientos de la ocupación para la cual se están formando
Dinámica: una programación nunca es algo totalmente acabado y estático, sino que está en constante revisión y evoluciona en función de la información que vamos obteniendo sobre los resultados parciales del desarrollo del curso.
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Flexible: ya que permite que se lleven a cabo modificaciones, ampliaciones y actualizaciones de los contenidos y actividades previstas, en caso de ser necesario.
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Creativa: al tratarse de un diseño propio y exclusivo, exige creatividad y originalidad. El personal docente decide sobre el quehacer en el aula según las características del grupo, las necesidades que se pretenden satisfacer y las propias posibilidades.
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Prospectiva: la programación consiste en realizar un pronóstico de la interacción que se va a producir en el aula.
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Sistemática: la programación es un proceso sistematizador que da coherencia a la acción formativa, contemplando todos los elementos intervinientes en el acto educativo y analizando sus relaciones.
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Integradora: permite integrar elementos de cualificación técnico-profesionales con elementos de cualificación personal del alumnado.
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Funcional: la programación en Formación Profesional para el Empleo se basa en el perfil profesional de la ocupación y estructura los contenidos formativos que proporcionan las competencias de ésta.
Según estas características, la programación no debe basarse en esquemas rígidos para lograr una total eficiencia que eliminen toda espontaneidad y creatividad; pero tampoco deben ser proyectos intuitivos por parte del personal docente que pueda dar lugar a que no se contemplen elementos que puedan ser clave en cualquier proceso de enseñanza-aprendizaje
3. ELEMENTOS DE LA PROGRAMACIÓN DIDÁCTICA.
La Programación se concibe como un proceso integrador y sistematizador que implica estructurar la acción formativa mediante la correcta coordinación de fines y medios, contenidos, objetivos y métodos.
Cuando abordamos la programación didáctica de una acción formativa podemos plantarnos algunas cuestiones:
¿A quién y en qué contexto va dirigida la acción formativa? GRUPO Y CONTEXTO.
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¿Qué competencias debe haber adquirido el alumnado al finalizar la acción formativa? OBJETIVOS COMPETENCIALES Y ESPECÍFICOS-CAPACIDADES.
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Qué conocimiento teórico, práctico y actitudinal se debe adquirir para alcanzar los objetivos? CONTENIDOS DIDÁCTICOS..
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¿Cómo trabajarlos en el aula, on line, estrategias…? METODOLOGÍA.
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¿Con qué ACTIVIDADES?
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¿De cuánto tiempo se dispone y qué vamos a dedicar a cada actividad? DISTRIBUCIÓN TEMPORAL.
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¿Qué medios didácticos se requieren para realizar esas actividades? RECURSOS DIDÁCTICOS
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¿Cómo sabremos si se ha producido el aprendizaje? CRITERIOS DE EVALUACIÓN.
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